El regalo de Navidad que recibió el fútbol del
subcontinente fue la olla de guisos, sobornos y fraudes que Eugenio Figueredo,
ex presidente de la Confederación Suramericana de Fútbol, destapó el jueves
ante la justicia de Uruguay.
Extraditado a su país natal luego de haber sido
detenido en Suiza por el escándalo de sobornos y corrupción que puso al
descubierto la investigación de la fiscal general de Estados Unidos, Loretta
Lynch, y el FBI, Figueredo confesó a la justicia uruguaya toda la trama de
corrupción de la Conmebol.
El ex dirigente de 83 años admitió al fiscal de
Uruguay, Juan Gómez, que junto a los demás miembros de la entidad, entre ellos
el ex presidente de la Federación Venezolana de Fútbol, Rafael Esquivel, urdían
diversas estratagemas para mantener “una aviesa forma de corrupción”.
Una de las prácticas más comunes era que “recibían
importantes sumas de dinero” de las empresas argentinas Full Play y Torneos y
Competencias para “evitar el llamado a oferentes y/o nuevos contratantes para
la comercialización de los derechos de televisión”.
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| El dinero recibido no aparecía |
Como ejemplo de estas prácticas corruptas que
“perjudicaban a los clubes y jugadores profesionales”, Figueredo cantó que los
presidentes de las federaciones recibieron sobornos de Full Play por la firma
de contratos de televisión “superiores a los 400 mil dólares”.
Declaró que como presidente de la Conmebol recibió un
sueldo de 40 mil dólares mensuales, un monto que nunca figuró “en los balances
de esa institución”, y que los presidentes de cada federación, como Esquivel,
se embolsillaban “20 mil dólares mensuales”.
El anciano federativo también admitió a la Fiscalía
de Uruguay que recibía otros 50 mil dólares mensuales de Torneos y Competencias
por “pagos indebidos”. Y desde su cargo se encargó de “legalizar la plata
dulce” que recibían los dirigentes de Conmebol, a través de operaciones de
“lavado de activos” y “transacciones inmobiliarias”.
Hospitalizado
Figueredo ingresó ayer a un hospital con molestias en
el pecho. Será evaluado y devuelto a la cárcel de Montevideo una vez
restablecido, mientras continúa el polémico juicio. Tomado de ultimasnoticias.com.ve
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