El fútbol sala es uno de los últimos deportes femeninos que acaba de
alzar la voz en las redes sociales para reivindicar su situación. Cansadas de
ver cómo la FIFA las ignora, esta semana han lanzado una reivindicación a nivel
mundial para reclamar su derecho a una competición oficial, bajo la
organización de la FIFA. Las jugadoras denuncian que su deporte no tiene
oficialidad alguna a nivel internacional, no disputan europeos ni Mundiales,
algo que consideran muy grave para sus aspiraciones de ser algún día deporte
olímpico.
Con el hangstag, #WomenPlayFutsalFIFA, las jugadoras de fútbol sala denuncian la falta de
un Mundial oficial. El pasado mes de diciembre, España jugó por quinto año un
Mundial que, aunque goza del 'consentimiento' de la FIFA, carece de
oficialidad. En el mismo, la Selección cayó en semifinales ante Portugal. En
Costa Rica, las jugadoras de todas las selecciones participantes grabaron
mensajes para Joseph Blatter, con el fin de hacerle llegar a éste en todos los
idiomas su descontento con una situación que consideran "injusta y
discriminatoria".
Patri Chamorro, jugadora del Móstoles y una de las capitanas de la
Selección, lanza un SOS para dar a conocer la difícil situación del fútbol sala
femenina: "No es sólo la falta de reconocimiento por parte de la FIFA. Hay
que mirar también lo que está pasando en España. Y la realidad es que la
competición ha perdido mucha calidad y que las jugadoras se están yendo fuera
de España. Antes, por ejemplo, la Copa de la Reina la jugaban los ocho primeros
y hace unos años se quedó en la mitad para reducir costes. Los costes
federativos ascienden cada temporada a 10.000 euros y esto ahoga a los
clubes".
Pese a la situación de abandono que denuncian las jugadoras de fútbol
sala, la Selección ha conquistado en los cinco Mundiales no oficiales en los
que ha participado dos platas y tres bronces. En los cinco torneos se proclamó
campeona Brasil, que este último año estuvo a punto de no participar por
problemas económicos. Hay que recordar que la participación en los mismos no se
gana en la cancha sino que participan las selecciones que pueden costearse su
participación, como es el caso de España.
"La exigencia de España es ganar y duele no haber conseguido el
objetivo, pero somos conscientes de que contamos con muy pocos medios y por
esto, todo lo conseguido tiene mucho mérito, pero queremos avanzar y aspiramos
a ser un deporte olímpico, pero si no existe una competición oficial no
podremos aspirar nunca a ello", reflexiona la capitana de la Selección.
La reivindicación lanzada a nivel mundial por las jugadoras de fútbol
sala está teniendo una gran repercusión en las redes sociales, a la que se han
unido personalidades del deporte español. Tomado de as.com / Isabel Roldán
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